Desde el AMPA Hermanos
Marx, apoyamos y valoramos positivamente la oferta educativa que el Departamento
de Educación ha planteado para el curso 2017/2018.
La polémica generada
por el anuncio del cierre de unidades en centros concertados (decisión de cada
empresa privada, no del Gobierno de Aragón) ha supuesto un gran revuelo
mediático y social, que no cesará una vez que el Departamento de Educación ha hecho pública la no renovación del concierto
a 13 aulas, de las más de 2.200 que hay en Aragón, de 13 centros privados,
11 de ellos en la ciudad de Zaragoza (también en Pina y en Zuera), y por
el que varios centros ya están anunciando que irán a los Tribunales.
Medida que nuestro
centro, concretamente, sufrió como escuela pública y tuvo que asumir durante el
curso 2013/2014, en el que antes de iniciarse el proceso de solicitudes se nos
suprimió la oferta educativa (pasando de 3 a 2 vías), causa por la que nuestro
centro tuvo que realizar sorteo con las solicitudes recibidas de 3 años y
varios niños no pudieron ser admitidos en el centro que ellos habían elegido por
falta de plazas.
A causa de esta supresión
de plazas en nuestro centro, unido a la disminución de población infantil que cada año se produce, actualmente tenemos una vía.
Sin ánimo de entrar en
polémicas, pero desde el compromiso de FAPAR
y el nuestro con la representación de las familias de la Escuela Pública
y la defensa de nuestra Escuela, que es la de tod@s, tenemos que tener muy
presente que:
- Desde el año 2011 en
la ciudad de Zaragoza ha disminuido la población de 3 años en casi 1.000
niñ@s, por lo que si hay menos niños los conciertos ya no hacen falta para
escolarizar.
- Desde el año 2011
hasta el año 2013 en la ciudad de Zaragoza, cuando ya estaba disminuyendo
la población a escolarizar, aumentaron dos conciertos en Teresiano
del Pilar y Virgen de Guadalupe (ambos no renovados ahora).
- Desde el 2011 hasta el
2015 en la ciudad de Zaragoza se cerraron 27 aulas de 3 años
exclusivamente en centros públicos.
- La no renovación de
conciertos de estas 13 aulas es una medida histórica pero no supone
el cierre de las mimas, ya que esta decisión será de cada centro, es decir,
será una decisión empresarial abrir o no un aula en su centro. Y también habrá
libertad de elección de cada familia para decidir si quiere escolarizar a su
hijo en una de esas aulas sin concierto y si paga o no un aula privada.
Por lo que entendemos que:
- La justificación de todos los conciertos, no es otra que cubrir aquellas
necesidades de escolarización donde no llega la pública. Por lo que una vez
realizada la planificación por parte de la DGA, hay zonas de escolarización
donde hay suficientes plazas en la pública y no habría necesidad de concertar
con la enseñanza privada.
- No se trata de un
ataque contra nadie, sino de una medida justa que exige corresponsabilidad en
una situación que hasta la fecha solo ha asumido nuestra Escuela Pública.
- No se vulnera ningún
derecho constitucional, porque nuestra Carta Magna garantiza la libertad
de Enseñanza y debe ser la administración pública la que garantice ese derecho
constitucional, pero su labor no es la de financiar empresas privadas que
realicen su misma función, y aún así seguirá habiendo centros concertados y
privados en aquellas zonas donde se requiera porque la pública no tenga plazas
suficientes.
- No se atenta contra el
derecho a elegir centro por parte de las familias, porque pueden seguir
haciéndolo y porque además ese derecho no está por encima de la obligación que
el Departamento ha ejercido de Planificar la Educación, por lo que ningún niño
quedará sin escolarizar ya que la escuela pública garantiza plazas para todos.
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